“Casi ángeles”: secretos y futuro

Peter Lanzani y Nico Riera hablan de la tira de televisión que Cris Morena supo convertir en un gran éxito.

Cuando arrancó con Cris Morena en 2006, Peter Lanzani tenía apenas 14 años y un manojo de escenas de castings. Con un poco de vergüenza, se vestía de huérfano a lo Mimo&Co para cantarle a la sensación agridulce de la pubertad.
Ya desde Chiquititas, una seriedad inusual lo destacaba. “Siempre he sido demasiado autoexigente, con todo”, asume -desde el estudio donde está grabando los últimos capítulos de la temporada final de Casi Ángeles- el muchacho que viene encarnando desde hace cuatro años a Thiago, el amor de Mar.

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-¿Qué ha sido lo más y qué lo menos de Casi Ángeles?

-Lo más, que hemos ido creciendo como actores. Lo menos, que el elenco no se mantuvo siempre igual (se fue Nico Vázquez, se fue Emilia Attias) y se los extrañó.
Paréntesis: como se sabe, la esposa del ‘Turco’ Naim se abrió al finalizar la tercera temporada de modo que los teens asumieron el desafío como quinteto protagónico.

-¿Cuántas horas al día sos Peter y cuántas Thiago?

-De 8 a 18 soy Thiago y de ahí en adelante un tipo bastante distinto.

-A ver...

-Quiero decir, alguien de mi edad. Thiago es un pibe de 18 que ha tenido que madurar y asimilar demasiadas cosas.

-En una de ésas, tendremos más adelante los ‘Ángeles Adultos’.

-(risas) Puede ser. No me extrañaría...

Lo que Peter viene asimilando desde que arrancó la tira es una disciplina fuerte a la que cedió, entre otras cosas, sus estudios de Dirección Cinematográfica, la carrera que dejó en primera base. “Igual -compensa- he ido aprendiendo todo este tiempo delante y detrás de las cámaras”.

-Decías que eras bastante tímido, ¿cómo encarás esas escenas ‘íntimas’ con Mar, por ejemplo?

-Es difícil, pero está muy muy cuidado todo. En la tira se habla siempre de ‘hacer el amor’, si te fijás. Pero bueno, también pensás que esas escenas las van a ver tus viejos y te da una cosita.
-¿Estás enamorado, Peter?

-Estoy bien, así.

-Así ¿cómo?
-Solo

-¿Y cómo te pegó la fama?

-Me la tomo con mucha calma. Trato de recibir toda esa energía y multiplicarla.

-¿Pensás que todo esto puede ser efímero?

-Pienso en construir una carrera, en seguir con la actuación, aunque todavía no tengo ningún proyecto seguro. No tengo idea de qué voy a hacer el año que viene.
Con todo el elenco, en especial con Nico Riera (Tacho) surgió una química innegable. “Esta noche nos vamos todos al cumple de Stefano”, suelta Nico comandando la juntada. Así que ahora, la charla la sigue ‘Tacho’.

- Ustedes son el amor imposible de muchas quinceañeras...

- Nada es imposible -interrumpe el rubio, con guiño gavilán.

- Bueno, pero pongamos que van por ahí coleccionando suspiros. ¿cuál es ‘tu’ amor platónico?

-Araceli González me gustaba mucho.

-Se rumoreaba que salías con Silvina Escudero, ¿qué hay de eso?
-No, nada, puro rumor... Estoy tranqui, solo.

Ambos, parecen sumar puntos con su perfil bajo, agradecen los piropos y aseguran que los coachs de Teen Angels han extraído lo mejor de ellos. “Lo que no sabíamos hacer, lo inventamos”, sincera Nico detrás del decorado.

-¿Y ustedes opinaban sobre el guión?

-En general no, pero después de compartir las giras, el guionista empezó a incluir guiños internos, cosas que tenían que ver con nosotros y que se colaban de los almuerzos o de las charlas previas.

- Hubo una canción tuya en la tira, ¿no?

-Sí, le mostré el tema a Cris sin mucha expectativa, pero ella dijo que estaba bien y alentó los retoques para que saliera.

-¿Entonces te lleva la música?

-Ahora estoy haciendo otro tema, para preparar un futuro demo. Pero soy bastante precavido con eso.

-Tacho, al contrario, es puro impulso...

-Sí, en eso nos distanciamos mucho. Yo pienso todo demasiado. Tengo sujeto a mi Tacho interno.

Dice que todos los miércoles se junta con los amigos a comer el asadito sagrado, que a veces pinta fútbol, que toma clases de guitarra y canto, que una vez por semana practica muai tai (una suerte de boxeo tailandés), que (auto) evoca cierta timidez, que ve su carrera de actor como una sorpresa constante.

“Por ejemplo, sacamos el disco de Teen Angels (sorpresa), fue disco de Platino (sorpresa), después Doble Platino (waw, sorpresa); el secreto es que nunca, jamás, nos acostumbramos a esto”.

Entre vivos, CDs y filmaciones, la popularidad de Teen Angels resultó arrolladora: tapas de revistas, histeria juvenil y un negocio exclusivo para su merchandising sumaron puntos al golazo de Cris Morena Group. ¿Conocen otro grupo argentino que haya vendido 220.000 entradas para un show?

Volvamos a Peter y Nico. Hay una necesidad en ambos de transmitir lo que tienen, un fervor que excede la idea de remedar esta tira para que algo funcione. Y resumen: “En definitiva, significa que amamos la tele. Es eso. Es lo que hay”.

Lo que hay ahora es una despedida -en vivo sí, en Andes Talleres- por eso mañana salen las entradas a la venta.

Angelicales son las vidas paralelas de Peter Lanzani y Nacho Riera, los actores que llegan a Mendoza junto Gastón Dalmau y a las bombas teens Marina Espósito y María Eugenia Suárez, para la gran despedida gran de Casi Ángeles. Peter tiene 20; Nacho 25 y se conocieron en el plató. Los dos tienen rostros de ángeles del universo Cris Morena Group, que conocen el estado de gracia como en su momento Nahuel Mutti o Tomás Fonzi .

Entonces, está el happy end. Ante todo, está la trama del musical pop con cinco estrellas jóvenes capaces de conquistar el mundo a fuerza de coreos, culebrón y cotillón artístico. En sus palabras: “Casi Ángeles podría durar toda la vida”. Por ahora, el cielo puede esperar.


Mariana Guzzante. Diario Los Andes de Mendoza