Emilia Attias en revista Luz

“Soy una mujer pura”

La actriz continúa al frente de la tercera temporada del éxito juvenil Casi Ángeles con el cual se convirtió en la heroína teen de la pantalla chica. Tras inaugurar su propia marca de ropa, nos revela detalles de su pasión por el arte y el esoterismo, y confirma sus ganas de casarse con su “gran amor”, el “Turco” Naim Sibara.

Emilia es una fiel exponente del ying y el yang de la filosofía oriental. En ella conviven dos fuerzas aparentemente opuestas, pero que a su vez son complementarias. Una es la joven de 22 años que vemos todos los días a las 19 horas en Casi Ángeles tercera temporada (que se emite por Telefé y subirá a escena el próximo 13 de junio en el teatro Gran Rex) que a pura energía baila, canta y actúa sin parar ni siquiera un segundo. Es sin dudas un gran huracán que arrolla con lo que se cruce por su camino.

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Por otro lado, la Emilia que nos recibe en su casa de Núñez es pura tranquilidad y equilibrio. Con sus rastas recogidas, indumentaria casual, sus pies descalzos y un té negro recién hecho se sumerge en una charla en la cual uno descubre que detrás de esa verborrágica joven hay una mujer ávida de espiritualidad y arte. Los cuartos de su casa lo demuestran: paredes coloridas, guitarras desparramadas por doquier, cuadros (pintados por ella misma y su pareja) desperdigados por el piso y varias imágenes esotéricas orientales. Todas estas dispares características configuran la verdadera Emilia. La misma que se encuentra enamorada del actor y músico el “Turco” Naim Sibara (que forma parte del staff de humoristas de ShowMatch e interpreta a Guillermo Moreno en la casa de Gran Cuñado). “Es el hombre de mi vida”, se anima a confesar la ahora también empresaria vinculada a la moda (abrió hace pocos días junto a su cuñada un local de ropa llamado Idioma Romance en pleno barrio porteño de Palermo) que sueña como Susanita con casarse y ser madre.

-¿Cómo vivís el éxito de Casi Ángeles tercera temporada?
-A full. Cada año que pasa se hace más intenso. Al mismo nivel que crece el éxito, lo hace también la intensidad con la que yo lo vivo. Este año tengo un personaje y un peinado nuevo, está bueno porque juego a ser doce horas por día una persona diferente. Eso me encanta, porque no me gusta repetirme.

-¿Te da miedo que a partir de este programa te convoquen siempre para interpretar a una heroína adolescente?
-La verdad que no. Nunca tuve miedos en mi carrera. Igualmente, pienso que el medio si quiere me puede encasillar, pero de lo que estoy más que segura es que todas las personas pueden reinventarse y eso depende de uno. Si no hacés nada, quizá te quedes pegada a un rol que tuvo mucho éxito entre el público. En cambio, si una tiene más para dar, eso no va a suceder.

-¿Por qué cambiaste el look y elegiste las rastas?
-Siempre quise tenerlas y a comienzos de año me enteré que iba a interpretar a otro personaje. Fue la ocasión indicada, entonces se lo propuse a Cris (Morena). Al principio le pareció fuerte, pero después me dejó probar. Ella es una mujer jugada, como yo.

-¿En qué aspectos o situaciones sos jugada?
-Soy muy arriesgada en todos los aspectos de mi vida. En el trabajo más, porque es el lugar en donde uno tiene que permitirse el juego. Las reglas para mí son ilimitadas y en todo momento me atrae lo arriesgado. Cuanto más osado sea, más me atrae.

-¿Por eso te animaste al diseño de ropa?
-En realidad abrimos un local con mi cuñada Carolina Pettinati, pero ella es la diseñadora y yo la imagen de la marca. La ropa está inspirada un poco en mi estilo. Quizá más adelante, cuando tenga más tiempo, me anime a lanzar una línea junto a ella. Creo que es otra faceta de mi ser creativo. Soy pura energía y necesito descargarla de todas las maneras posibles.

-Hacés teatro, televisión diaria, grabás también los cd's de la tira y ahora tenés tu propio local de ropa, ¿nunca sentiste ganas de abandonar todo?
-A veces, sí. Más que nada me sucedía al principio de mi carrera. Cotidianamente tenés padecimientos, pero cada vez que me quejo, pienso que me está pasando algo increíble. Entiendo cómo va la vida. Con el correr de los años siento la coherencia de lo que estoy haciendo, tengo un camino en mi cabeza. No soy ninguna tonta. Entonces disfruto de transitar por este sendero.

-¿Cuál es ese camino deseado?
-Soy bastante clara con lo que quiero, pero a su vez me gusta dejarme sorprender por el azar. Soy también contradictoria. Creo que el destino siempre nos sorprende por demás. Todo lo que sueño hacer está relacionado con el arte. A mí me gusta mucho crear, expresarme y comunicarme. Tengo el arte a flor de piel. Siempre quise cantar, bailar, actuar y viajar por el mundo; y creo que más o menos lo voy logrando al pie de la letra. Además, me obsesiono por aprender. Quiero ser una artista en serio y no vivir de estas oportunidades que te da el medio por ser linda. Ni siquiera sé bien para qué estoy preparada hoy en día, no lo puedo medir. Soy tan lanzada que creo que si me llaman para un casting en Hollywood voy corriendo.

-Haciendo alusión al programa que encabezás, ¿tenés características de ángel?
-Sí. Por algún motivo creo que Cris me convocó. Me encanta la alegría, me gusta mucho ayudar a las personas, tengo un espíritu salvador, contenedor y servicial innato. Soy muy caritativa y compasiva. Soy una mujer pura, aunque haya muy poca gente así en el mundo.

-También sos una mujer que está vinculada a lo espiritual, ¿cómo hacés para conjugar esta faceta tuya con este medio tan frívolo y competitivo?
-Soy así por naturaleza, me gusta lo esotérico y metafísico. Leo mucha astrología, Kabalah, hinduismo, budismo, chamanismo, filosofía celta, de todo. No soy metódica, porque no soy matemática en mi vida, pero cuando mi energía baja acudo a algo que me haga bien. Trato de llevar una vida espiritual en todo momento.

-Me imagino que el amor es el mejor alimento para tu espíritu. Hace cuatro años que estás en pareja con el “Turco” Naim Sibara, ¿qué te enamora de él?
-Es el hombre de mi vida. Desde el comienzo lo viví así. Somos muy parecidos en el tipo de vida que elegimos, eso es muy importante. Somos muy creativos. En casa se respira continuamente arte. Él me nutre y yo lo nutro en el tema de la espiritualidad. Yo lo admiro y él a mí, eso nos atrae. Somos optimistas y tenemos el mismo nivel de energía. Nos potenciamos. Estamos decididos a acompañarnos en todo lo que hagamos y no poner el ego de uno sobre otro. Además nos queremos mucho y nos gustamos demasiado.

-¿Te molesta que el público comente que son una pareja despareja?
-Me re-divierte. La gente mide todo con su propia lupa. Estamos seguros de cómo estamos y quiénes somos. Cada vez que sale algo o nos hacen algún comentario al respecto se lo cuento a él para reírnos a carcajadas.

-¿La diferencia de edad juega un rol importante en la pareja?
-Para nada. Es algo que no lo entiendo. Yo me enamoré de él, no de su edad. No tiene nada que ver.

-¿Lo admirás al “Turco” a nivel artístico?
-Es lo más. La gente no lo conoce, pero él es un gran artista, es brillante. Actúa, escribe guiones, dirige cine, pinta, tiene una banda de rock, compone, toca la guitarra, canta tangos como Gardel... Tiene una voz fuerte como el vocalista de Pearl Jam. Es muy creativo y comprometido en lo que hace. Es una persona muy culta. Un artista sumamente completo.

-¿Te gustaría casarte con él?
-Quiero casarme con él y tener hijos porque lo amo profundamente. Sé que en algún momento va a pasar. Nunca pensé en la boda, pero al encontrarme enamorada me dieron ganas. Cuando se dé, lo haremos. Pero no es algo prioritario. Puede ser muy pronto o no. No lo sé. Tenemos que pensar cómo queremos bendecir nuestro amor.

-¿Y la maternidad está en segundo plano?
-¡No! Soy re-maternal. Me encantan los chicos. Soy muy femenina en ese aspecto. Hace poco me tatué un pavo real que es el símbolo de la fertilidad y femineidad del hinduismo. Soy muy hembra. Tengo lo femenino a flor de piel.

-Tenés 22 años y llevás la vida de una chica mucho mayor. ¿Te sentís por momentos una persona más grande?
-No, no me siento mayor, pero siempre tuve la sensación de que fui más madura que las demás chicas de mi edad. Tuve desde niña la lucidez de estar enfocada en lo que quería. Esta característica te hace tomar la riendas de tu vida más temprano. Quizá eso es lo que me diferencia de las demás chicas.

Revista Luz. Fuente: CasiAngeles.com